LLegó la Navidad

Pensé dedicar el domingo en la tarde, a escribir sobre el armado del pesebre y el arbolito de nuestra primera Navidad en Santa Cruz, pero el ánimo de escritura está vivo ahora, a las 01:00 hrs., ya veré cómo me levanto en la mañana.

Como siempre, empezamos por sacar esas dos cajas de cartón que nos han acompañado desde hace algunos añitos, parchadas, fumigadas y con varios golpes después de la mudanza. En una, estaba el arbolito, desmembrado y lleno de tierra, pero por suerte sin bichos. En la otra, los adornos varios, envueltos en hojas de El Mercurio y bolsas del Líder... uy! aquí ya empezó la secuencia de recuerdos y nostalgias, imagínense como sería después con cada cosita que sacábamos de su papel.

Este primer año de fiestas, lejos de todos los que mas queremos, no va a ser fácil, para que engañarse, la tecnología ayuda claro, pero daría lo que fuese por un abrazo de carne y hueso.

Me prometí no caer en el drama, como diría mi hijo Luis, pero bueno, qué se hace si los echo de menos y los quiero tanto. El estado de tranquilidad llega, porque se que estarán juntos y mis niños, acompañados de abuelos, tíos, primos y medias naranjas, que los quieren muchísimo. En fin, habiendo sido hecha la racionalización del drama, pienso que los montones de abrazos deberán guardarse, para ser entregados en dosis a cada visitante que llegará durante el próximo año, y con los lagrimones, ídem. Por lo tanto, he decidido que mi Navidad se celebrará en partes durante el 2011.

Aquí van unas fotos del proceso, y en el blog familiar otras tantas, para los que quieran curiosear tomen nota: leivaalba.wordpress.com

Otros detallitos de los festejos los subiré en la semana. Por ahora, déjense inundar del Espíritu Navideño, así como la Ozzy.